Quien hoy decide involucrarse en la política con honestidad, ideales y un propósito genuino de transformación social está yendo contracorriente; es decir, está actuando de forma contracultural. En un mundo donde muchos se mueven por interés, hacerlo por convicción es casi un acto de rebeldía ética.Este libro es un desafío a la indiferencia y al conformismo; es un llamado a la acción para quienes creen que el liderazgo va más allá de un cargo y que las grandes transformaciones requieren algo más que voluntad: requieren visión, carácter y un compromiso inquebrantable con la historia, porque al final solo hay dos destinos posibles para un líder: el olvido o la gloria.Pensar en el legado político es mirarse en el espejo de la historia y preguntarse: ¿cómo quiero ser recordado? 10
