Con ilusión de formarse, Edelmiro pone tierra por medio, huyendo de los suyos por mala praxis, buscado un futuro laboral convincente. Después de adaptarse a varias labores, algo que le llena en ese pazo. Con la pasión de ser útil en jardinería y, reparaciones varias; cuando la señora se le agradece el reparar ese enchufe. Su meta no es conquistar, solo las circunstancias le abocan e seguir parejo al tiempo, aprendiendo de la vida, y con esa amistad de la señora, se cree tocar el cielo. Creándose una historia de amor y muerte. Donde se ve cercano al tráfico de drogas por parte del empresario para quien trabaja, relacionado con el crimen. El empresario termina en la cárcel, de la cual saldrá con los pies por delante, por enfermedad hepática. Solo su descendencia, logra continuidad, floreciendo el amor entre ellos. Y si a todo ello se le añaden viajes por los litorales gallegos, como la tierra de los mil ríos y su Ribeira Sacra. Podría ponerse la guinda a esta historia.
