Usted no sabrá lo importante que es la humildad en su vida hasta que lea este libroEn tanto muchos libros nos ofrecen cómo yo puedo hacerme grande, Murray nos muestra que la vida se trata de todo lo contrario, que la verdadera grandeza del hombre y su felicidad está precisamente en la humildad; que jamás podré realmente crecer como cristiano y como persona si no tengo la humildad de Jesús.Este clásico de la literatura cristiana nos muestra con bastante claridad qué es la humildad, por qué es tan fundamental, cómo obtenerla y cómo perseverar en ella. Andrew Murray nos lleva por un recorrido bíblico -por la vida de Jesús y los escritos apostólicos- demostrándonos como el orgullo es la peor de las calamidades humanas, y la humildad, su gloria. Este libro es realmente fascinante e instructivo. No por nada desde hace más de cien años está en la lista de los diez libros cristianos más leídos y amados de la historia. Alguien dijo una vez: Me he dado cuenta de que no podré leer todos los libros que se han escrito: leeré solo los mejores.La versión al español de este libro fue realizada siguiendo una fina traducción dinámica, de ajustes literarios, de estilo, y utilizando un lenguaje bien cuidado; todo a fin de obtener un texto cuya lectura fuese un deleite para el lector, al tiempo de ser perfectamente fiel al original. En este libro usted aprenderá: Por qué la humildad es la gloria de la creatura.Qué estrecha relación existe entre la humildad y la santidad, por qué la humildad es la belleza de la santidad; y por qué una no puede vivir sin la otra.Lo mucho que tiene que ver la humildad en la redención del pecador. Por qué la humildad es la madre de las virtudes. Por qué el orgullo es algo tan maligno.Cómo saber si uno es verdaderamente humilde. Cuáles son las enseñanzas y vida de Jesús sobre la humildad.¿Es humilde el que siempre se está confesando pecador?Sobre la muerte al yo.Cómo la humildad se relaciona con la fe.Lo que la humildad ofrece al hombre: la felicidad y la exaltación de Dios.En qué consiste la exaltación de Dios para el corazón humilde.
